¡S.O.S! Necesitamos un nuevo chiringuito.

Necesitamos un nuevo chiringuito,

 

recuerdo hace unos años cuando, ante la creciente demanda y oferta de chiringuitos de playa, investigué por curiosidad que requisitos se debían cumplir para montar uno. Los indicios ilusorios (¿a quién no le gustaría tener uno, aunque sea un verano?) pronto se desvanecieron al darme cuenta de que era algo fuera de mi alcance: había que ser hostelero, participar en un concurso para su explotación, tener un capital, seguros, empleados y un largo etc.

Sin ir más lejos, un día de esos en los que dejas a un lado las redes sociales y la TV para invertirlo en introspección, reflexioné y llegué a la conclusión de cierto paralelismo: ‹‹¡La política es un puto chiringuito!›› ¡SÍ! Pero no un chiringuito cualquiera, es uno VIP, de los que molan de verdad. Lo tienen muy bien montado y se lo pasan de mano en mano cada ciertos años: intercambian maletines, roles, poderes, asientos y, ¡a vivir la vida! Un chiringuito perfectamente estructurado con trampas burocráticas y complejas leyes para que nadie ose arrebatárselo. O entras en su secta o estás jodido. Y el chiringuito les va de puta madre, creedme. Ellos continúan a lo suyo mientras a nosotros nos siguen engañando, nos confrontan, nos dividen, nos ahogan… Y lo peor es que nadie se quiere dar cuenta. ¿No veis qué esto va a seguir cambiando de manos y siempre vamos a estar igual? Es un bucle sin final donde unos siempre ganan: los políticos. Y una gran parte pierde: el pueblo.

Albert Einstein dijo hace muchos años: “locura es hacer lo mismo, una y otra vez, esperando obtener resultados diferentes”.

¿Esto es lo qué queréis? ¿Siempre lo mismo y continuas decepciones? ¿Idénticos y nefastos resultados? Me refiero a vosotros, al pueblo. Evidentemente a nuestra casta política (Sí, Pablo, tú también estás incluido) no les interesa hacer algo distinto, o de lo contrario, perderían el codiciado chiringuito. Esto no necesita discrepancias, necesita unión. No necesita inacción, necesita de una auténtica revolución. Un cambio integral en nuestro sistema político. Nuevas formas de hacer política. Nuevas propuestas. Evolución, no quedarnos atrapados en los ideales de hace siglos. ¡Hay que hacer algo distinto ya! Salgamos a la calle cuando se pueda, pero no para quitar “Guatemala” y que entre “Guatepeor”. ¡Salgamos contra todos ellos! Obliguémoslos a un cambio real: a modificar las leyes que los amparan, a dar más potestad al pueblo, a que seamos nosotros quien decida su sueldo, a que opositen para poder ejercer un cargo público, a que lleguen a consensos prevaleciendo el bienestar general por encima de los intereses partidistas, a que no despilfarren el dinero, a que no tengan impunidad por todo, etc. Hagamos esto viral en el mundo entero, porque el chiringuito no es nacional, es mundial.

¡Yo quiero resultados diferentes! ¿Y vosotros?


Fluid y compartid (fluidos).

Héctor Giménez Tamayo

Héctor Giménez Tamayo

Héctor Giménez Tamayo (27/06/1983). Natural de Alicante (España) y ciudadano del mundo. No está bien que lo diga, pero es la verdad: desde bien pequeño la escuela me aburría.

Una novela de Héctor GT

Un inesperado tropiezo con unos mafiosos y un accidente de tráfico cambiarán la acomodada vida del protagonista. A partir de este suceso, su vida dará un giro de ciento ochenta grados. Ya no volverá a ser el mismo de antes.

HEY ESPERA !!

Antes De Irte, Comentarte Que Voy A Sortear Varias Camisetas Para Promocionar Mi Libro. Si Quieres Entrar En El Sorteo Solo Tienes Que Subscribirte. Tranquilo, Sin Spam Y Sin Agobios. Solo Mandaré Alguna Que Otra Newsletter Cuando Sea Necesario.. Te Apuntas ??